El sábado 18 comenzó la 3ª jornada de MBFWM, durante la que se pudieron ver las propuestas de los siguientes diseñadores.
Inspirándose en el cineasta y director David Lynch, y su película Mulholand Drive, Moisés Nieto mostró sobre la pasarela madrileña una colección con esencia retro pero con una clara visión de futuro. La gran variedad de colores yuxtapuestos, los tonos metalizados, las siluetas rectas y los accesorios vintage predominaron en todos los conjuntos encima de la pasarela.
Compartiendo pasarela con Moisés Nieto, también desfiló Miguel Marinero. Con escenas de pinturas de Velázquez estampadas por muchas de las piezas, la colección del diseñador se convirtió en un llamamiento al arte, destacando la gama de colores nude, los verdes y los rojos.
El diseñador Andrés Sardá viajó en el tiempo con su nueva colección, que evocaba a la Revolución Francesa y su sociedad. Victoria Abril fue la encargada de abrir el desfile, que comenzó con sencillos conjuntos en algodón blanco y tul de seda. La evolución del desfile se vio a través de colores berenjena y lilas, y el uso de encajes, hasta la utilización de telas más pesadas y multitud de detalles para conjuntos recargados de la alta sociedad francesa.
La sastrería tradicional y el patronaje artesano, emblemas de Roberto Torretta, fueron el eje central de la nueva colección para el próximo otoño de la firma. Chaquetas que marcan la cintura, conjuntos de dos piezas con faldas midi, y vestidos de hombros asimétricos conforman una colección pensada para la mujer actual. Los colores lisos se adueñan de las piezas, dejando ver en ocasiones estampados florales.
«The Dreamer» es la nueva colección de Ana Locking que presentó durante la 3ª jornada de MBFWM. Una propuesta que se convierte en un grito por la libertad y los derechos, bajo un lema muy claro «All the power to the dreamers«. El negro, el rojo y los tonos nude inundan las prendas, que a su vez se llenan de detalles como volantes, mangas y cuellos asimétricos, y de accesorios como gafas de sol y boinas.
Hannibal Laguna por su parte, viste a la mujer para eventos de gala y fiesta con una variedad de vestidos que van desde los largos infinitos, hasta los cortes midi y las minifaldas. Siguiendo la tendencia del «see now, buy now«, Laguna juega en toda la colección, llamada «Silverspring«, con los colores claros, los tonos nude, rosas y azules, dejando ver destellos dorados y estampados y brocados florales en vestidos vaporosos.El acento british lo puso Teresa Helbig con una colección que hace homenaje a la estética de la vieja aristocracia del país anglosajón, con el nombre de «Old Money«. La representación de esta estética se consigue a través de tejidos clásicos como la seda, el terciopelo o el chantilly, los brocados, y el tartán en trajes de dos piezas y vestidos sofisticados, que se culminan con una gran lazada al cuello.
El último desfile del día corrió a cargo del debut de la firma Menchén Tomás. Los conjuntos, inspirados en Lita Cabellut, evolucionan del negro más puro, pasando por la paleta de grises, azules y verdes, hasta llegar al rojo más vivo. Pensada para una mujer fuerte, segura y muy femenina, la colección reúne transparencias, tejidos fluidos, piezas oversize, y vestidos de fiesta para la noche.
