Debido al enorme impacto de las falsificaciones en el sector de la moda, el pasado 2 de enero se celebró en IFEMA un coloquio en el que se dieron cita representantes de los principales organismos que luchan contra esa problemática y del que se pudieron extraer datos muy relevantes.
Durante el encuentro, titulado “El impacto económico y social de las falsificaciones en la moda”, los ponentes trataron de concienciar sobre las consecuencias económicas de las falsificaciones en todas las fases de creación, producción y distribución. También se habló del impacto social, en relación con la pérdida de puestos de trabajo.
José Antonio Moreno Campos, director general de ANDEMA (Asociación para la Defensa de la Marca), apuntó algunos de los datos más significativos, que quedan resumidos en los siguientes puntos:
– El 80 % de los productos falsificados provienen de China
– El impacto económico de las falsificaciones supone un total de 29.816 millones de euros en la Unión Europea
– Se estima que el mercado de productos falsos ha contribuido a la pérdida de 383.700 puestos de trabajo
– En cuanto a los impuestos no recaudados, se habla de cifras que rondan los 9.216 millones de euros en la Unión Europea
También participó en la mesa redonda, moderada por Pilar Riaño (directora de modaes.es), el presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Marroquinería, Félix Bellido, que recalcó que las falsificaciones no solo afectan a las marcas de lujo, sino también a las pequeñas empresas e industrias auxiliares, ya que les restan un importante volumen de ventas.
Con él coincide el presidente de la Asociación Empresarial de Fabricantes y Comerciantes de Artículos de Regalo, Neil Fernández, que dedicó su intervención a poner en valor la existencia de esa gran industria de pequeños comerciantes, empresas y autónomos que trabajan para grandes marcas y que se ven afectados.
Modesto Lomba, diseñador y presidente de la Asociación de Creadores de Moda de España, sacó a relucir otro de los peligros inherentes a este tipo de fraudes: el uso de productos químicos no autorizados que pueden llegar a ser nocivos para la salud de los consumidores.
“A un creador no le debe preocupar la copia o imitación, ya que de su trabajo nacen las tendencias, pero sí de las falsificaciones porque no solo afectan a copiar un producto sino a todo lo que supone una marca”, subrayó también Lomba, que considera que “el precio no es el único factor en la compra de falsificaciones”. En su opinión, la educación de los consumidores también influye.
En esa línea, Ángel Asensio, Presidente de la Confederación Moda España, quiso aludir a la responsabilidad de los compradores con el objetivo de que aumente la concienciación.
