Alejandro Bocanegra

Madrid visto por Alejandro Bocanegra

Madrid visto por Alejandro Bocanegra

firmado por Alejandro bocanegra –  periodista en flash moda (rtve)

Hoy (mientras escribo esto) es catorce de febrero. Tenía semanas para empezar este artículo y casualmente elegí arrancarlo hoy; el único día que tenía libre de trabajo entre la cobertura de los Premios Goya y la Semana de la Moda de Madrid. La fecha ideal para narrar la historia de amor gratamente correspondido que tengo con esta capital.

Hace años esta ciudad representaba el romance más platónico que un adolescente podía soñar desde la habitación de su casa familiar en Santander (sé que suena a cliché de película americana, pero creedme, aunque suene cursi es la realidad). La moda, las tiendas, los desfiles , las revistas, los diseñadores, las celebrities todo estaba en esta ciudad. Mis padres me dieron la llave de entrada este mundo onírico en forma de master, mi esfuerzo y un par de hadas madrinas profesionales hicieron que años después el sueño se convirtiese en mi día a día. En mi realidad.

MAdrid capital de la moda

Llevo casi 11 años trabajando como redactor de moda en el programa Flash Moda de TVE y gracias a este medio he entrevistado a las personas más increíbles y vivido las mejores experiencias imaginables en esta profesión. De las imprescindibles citas en IFEMA cada Fashion Week a las sorprendentes ediciones de Madrid es Moda donde he visto, por ejemplo, desfilar a amigas por mitad de la Castellana parando el tráfico vestidas de Modesto Lomba.

Si trabajas en moda en esta ciudad más vale que sepas escoger un buen estilismo cada mañana antes de ir al trabajo porque nunca sabes dónde y cómo vas a acabar. Ver desfiles en mitad de un circo, tomar cócteles en un museo cerrado solo para ti, preparar la cena en la cocina de Coque junto a Quique Dacosta, Maca de Castro y Mario Sandoval, bailar hasta el amanecer en una estación de metro abandonada (de manera legal y con todos los permisos necesarios, que quede claro eh), encontrarte con tu diseñador internacional favorito de incógnito en la discoteca más canalla de Chueca (porque a él también le gusta la noche madrileña) … Todo es posible.

 

TODO ES POSIBLE EN MADRID

¿Y por qué todo es posible? Porque este lugar es la ciudad de las oportunidades y porque sus habitantes no tienen ningún miedo a vivir cada una de ellas.

Constantemente aparecen nuevas ideas, se fundan proyectos y suenan diferentes nombres dentro del sector. Pegado a la cámara, he vivido el nacimiento de creadores hoy consagrados que temblaban de nervios en su primera entrevista con Televisión Española. He inaugurado (y lamentablemente clausurado) atelieres y showrooms por toda la ciudad. De las Majestuosas casas del barrio Salamanca o Almagro a los espacios industriales de Matadero cada set de rodaje me ha mostrado riqueza en diseño más allá de la moda, también en el interiorismo y en la arquitectura.

Pero junto a la calidad creativa, artística, estética y cultural está la calidad humana, que es lo que hace que en Madrid los aplausos en las pasarelas sean más fuertes, las comidas más sabrosas y las fiestas más largas.

El mayor agradecimiento que debo a esta ciudad es poner en mi camino a las mejores personas que he podido conocer. Profesionales convertidos en amigos, amigos convertidos en profesionales (que hoy triunfan y celebran conmigo el difícil camino al éxito), compañeros generosos, jefes comprensivos, y sorprendentes vecinos (¿Cómo de fuerte es que durante años Anna Castillo y yo vivimos pared con pared en un pequeño piso del centro sin darnos cuenta de quién era quién hasta que nos encontramos frente a frente en la alfombra roja de unos premios Goya cuando estaba nominada como actriz revelación?). Pero no todo lo bueno pasa en horario laboral, cuando ficho salida en el trabajo y vuelvo caminando a casa es cuando disfruto realmente de esta ciudad.

CHUECA: eL MADRID MÁS ECLÉTICO

Castizo y a la vez moderno. Internacional pero lleno de pequeños negocios locales, frenético, pero a la vez tranquilo, y confortable para todos los que vivimos en él, puedo afirmar que no hay barrio en Madrid como el barrio de Chueca.

Mis mejores planes siempre empiezan su plaza a la hora del aperitivo, tomando un vermú al sol en la Taberna de Angel Sierra, o en el Fermentera un informal bar con picoteo de cocina balear, donde su encargado Edu hace que te sientas como en tu propia casa. Mis amigos dicen que no salgo del barrio, pero ¿Pará que voy a hacerlo si aquí tengo de todo?

¿Quieres un sitio romántico para una primera cita? Ve a Mune un pequeñísimo restaurante libanes íntimo y precioso en la calle Pelayo. No sé si te durará el pretendiente, pero de su hummus de trufa no te olvidas seguro. Si está lleno, algo lamentablemente en común, pide mesa en Cannibal, su tartar de atún picante también queda en el recuerdo.

¿Una noche divertida con amigos? En la Torcida de Pelayo cenas mientras Drag Queens hacen un silent show a través de auriculares. ¿Te gusta la comida china? Pues en Biang Biang hacen los mejores tallarines handmade de la ciudad. Si no tienes miedo a los manteles de papel y los taburetes duros este es tu sitio.

¿Quieres sorprender celebrando un cumpleaños diferente? Todos tus invitados alucinarán cuando la trastienda de una elegante tienda de ropa se transforme en el karaoke con salas privadas de moda de la ciudad. Se llama Playback y está en plena calle Piamonte.

Pero en mi barrio no solo se come y se bebe, también se compra. La calle Barquillo es ideal para los que busquen moda masculina fuera del sector más comercial, y Almirante y Conde de Xiquena el paraíso de las tiendas femeninas de fiesta e invitadas.

Pero la moda va más allá del shopping que puedas hacer en estas tiendas tan bonitas o de los desfiles que vivas sentado en un front row. La moda, además de ser industria, y cultura es sentimiento y es expresión; del que la crea, del que la lleva o del que simplemente la disfruta soñando frente a un escaparate que se cruza en su camino en unos de esos interminables paseos sin rumbo por Madrid.